CARACTERÍSTICAS
Juego tradicional aragonés de puntería y habilidad, que consiste en introducir unas chapas en los agujeros de la tabla de los hoyetes. Antiguamente era un juego de tabernas donde se realizaban distintas apuestas como el pago de las rondas. Actualmente se juega en fiestas, con grupos de amigos, peñas y como no como juego tradicional en colegios e institutos, a lo largo de Aragón.
La línea de tiro se marca a 3 metros de la tabla.
Se puede jugar a puntos, individualmente o por parejas, hasta conseguir un mínimo de 300 o 600 puntos respectivamente.
VALORES
Potencia la concentración y la precisión, favorece la socialización. La rapidez de sus partidas y la simplicidad de sus reglas permite ser jugado por mucha gente de edades muy diferentes.
OBSERVACIONES
Ideal para jugar en el exterior, patios de colegios, asociaciones, etc… Apto a partir de 5 años.
DESCRIPCIÓN
La tabla (de madera) se pondrá llana en el suelo y la línea de tiro se marcará a 3 metros, situándose el hoyo de 60 puntos el más lejano de la línea de tiro.
Las piezas de lanzar reciben los nombres de chapa o ficha, y son de hierro o acero.
Hay dos modalidades de juego: a puntos y a tapar, pudiéndose jugar individualmente o por parejas.
- A puntos: cada jugador lanza sus fichas hasta conseguir el mínimo estipulado.
- A tapar: gana el jugador o pareja que consiga tapar antes todos los agujeros.
PUNTUACIÓN
Cada agujero tiene una puntuación distinta, indicada en la tabla. El orden de tirada se establece por sorteo.
- La chapa se considera válida si cae dentro del agujero, siendo válidas también aquellas que sean empujadas por otras.
- Las chapas que caen fuera de la tabla: 0 puntos.
- Cuando una chapa es desplazada fuera de la tabla por otra: 0 puntos.
- La chapa es nula cuando cae en la tabla después de un rebote exterior a esta.
- Se pueden meter varias chapas en un mismo agujero, el resultado será la suma de todas ellas.
- También tienen un valor de 4 puntos aquellas que caigan directamente sobre la tabla.